Cuando
comenzamos este proyecto nunca imaginamos que todo saldría como está
sucediendo. Era muy diferente lo que teníamos en mente, un libro colectivo,
financiado a través del crowfunding, pero las circunstancias y el azar lo han
ido dirigiendo por otros derroteros. Cada paso que damos nos sorprende como la
Diosa Fortuna dirige los hilos del proyecto. Dicen que la suerte hay que buscarla,
que no llega por casualidad, y quizás nosotros hayamos puesto nuestro granito
de arena para que esto sea así, pero no nos cabe duda que este proyecto tiene
esa pizca de suerte que hace cuadrar todas nuestras ideas. El venderlo ya es
otro cantar. Y de cantares va este post, unos con letras directas, acordes
impresionantes de guitarra, un estilo propio. Los de Rosendo Mercado.
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Eugenio Muñoz, Rosendo Mercado, Moi Palmero |
Cuando en el
mes de agosto terminamos de escribir los relatos nos pusimos a preparar los
agradecimientos que los habían hecho posible y sin saber la razón, la canción
Agradecido apareció en nuestra mente. Y nos pareció una buena idea utilizar
alguno de sus párrafos para comenzar ese último apartado del libro. En ningún
momento imaginamos que tendríamos la ocasión de mostrárselo al maestro que nos
susurro esas palabras a lo largo de nuestra vida.
Meses
más tarde, cuando comenzábamos este apartado del blog, decidimos colgar la
caratula del disco donde aparece esa canción y enlazar a un video de uno de sus
conciertos en Barcelona. El terminar el libro, tarareando Agradecido nos parecía
buena idea. Ni por asomo se nos pasaba que algún día le podríamos entregar el
libro en mano. Pero esta semana, el martes por la mañana, todos esos sucesos
cobraron sentido para materializarse en la foto de la portada. Una foto que
para él será una más entre las miles que se habrá hecho con sus fans, pero para
nosotros, es importante porque nos demuestra, nos confirma, que la Fortuna nos
acompaña en este proyecto. La sentimos muy cerca, tanto que su calor, sus
caricias, sus susurros, nos dan la fuerza para atrevernos con cualquier cosa.
Cuando
vimos que Rosendo venía a Almería tuvimos la idea, la necesidad, de entregarle
un libro que termina con sus palabras, con su nombre. Que menos que entre los
libros de su biblioteca pueda guardar uno que inspiraron sus canciones. Quizás
no lo lea nunca, quizás quede olvidado en algún rincón de su casa, pero quien
sabe, ahora que disfruta de la casita que se compró en una pequeña aldea de
Burgos, apartado del bullicio de su barrio de Carabanchel, en algún momento se
siente a leerlo, a pasear por la Comarca del Río Nacimiento.
Intentamos
por todos los medios a nuestro alcance conocer si daría alguna rueda de prensa
para presentar su último disco “Vergüenza torera”, pero después de cuarenta años
de carrera, con discos míticos en el rock nacional, no necesita presentar nada.
Sus conciertos se llenan solos, de gente que crecieron con su música, y jóvenes
que siguen viendo en sus letras verdades sociales con las que gritar sus
inquietudes. Por ahí no sería posible. Así que pensamos que la única manera
sería llegar hasta los camerinos tras el concierto, pero dedujimos que habría más fans como nosotros quisiesen un
autógrafo. Solo cabía esperarlo en el hotel que se hospedase para “asaltarlo”
en la puerta, para robarle un minuto, para tener la posibilidad de entregarle
el libro. ¿Pero en qué hotel esperarlo?. Y ahí, ahí la diosa fortuna , volvió a
susurrarnos el camino para lanzarnos un destello de inspiración justo cuando lo
necesitamos. Nos mostró una imagen del instituto, de un compañero que podría
ayudarnos. Y lo hizo, como siempre que se lo hemos pedido, gustosamente.
Estamos
Agradecidos a todos los que hicieron posible que le entregásemos el libro, que
nos hiciésemos la foto y que ahora podamos colgarla en el blog de nuestro
proyecto:
-
Francisco Bailón, que con sus consejos y su experiencia,
supuso los pasos que daría Rosendo en su estancia en Almería. Él fue la clave
de todo, sin él todo hubiese sido mas difícil. Agradecido.
-
Rafa J. Vegas, bajista de Rosendo desde hace 20
años, por la amabilidad con la que nos atendió en la puerta del hotel. Por
bajar a buscarnos un rato después para indicarnos la hora a la que saldrían.
-
Eugenio Muñoz, productor y manager, de Rosendo, por facilitarnos ese
momento.
-
Rosendo Mercado, por dedicarnos esos minutos y
posar con nosotros en la foto.
Quizás, sea
solo eso, una foto más. Una foto sin importancia de un fan con uno de los que
pusieron banda sonora a su juventud, pero para nosotros, como decía Jose
Ignacio Lapido, en uno de los míticos temas de la legendaria formación 091, es
la certeza de que “aunque parezco un perdedor soy un hombre con suerte”